A diferencia del verano, en invierno tu jardín descansa. Sin embargo, también requiere cuidados especiales en la estación fría. Te contamos qué errores debes evitar en el jardín y cómo puedes apoyar las plantas en el jardín. Esto no sólo evita daños, sino que también garantiza que puedas volver a disfrutar de tus plantas perennes en primavera.

Los 10 errores más comunes al hacer jardinería en invierno:

Caminar sobre el césped cuando nieva puede causar daños. ¿Y sabías que las plantas del jardín también pueden morir de sed en invierno? Para que la primavera no empiece con una sorpresa desagradable, ahora hay que prestar atención a ciertas cosas del jardín.

1. No protegen los árboles sensibles

Cuando el sol brilla a temperaturas bajo cero, el riesgo de que los árboles sufran daños por heladas es especialmente alto. El lado del tronco que da al sol se calienta, lo que hace que la corteza se expanda. Durante este tiempo, el lado opuesto al sol permanece congelado. La tensión resultante acaba por desgarrar la corteza. Las heridas en la corteza permiten que crezcan parásitos, hongos y bacterias. Los árboles jóvenes corren especial riesgo.

2. No riegues las plantas del jardín en invierno.

Un error común al hacer jardinería en invierno: dejamos de regar por completo. Sin embargo, las plantas de jardín de hoja perenne necesitan algo de agua incluso en invierno. Cuando brilla el sol, el agua se evapora a través de las hojas. Si el suelo se congela al mismo tiempo, las raíces no pueden absorber los nutrientes. En cuanto el suelo se haya descongelado un poco, conviene regar un poco la planta.

Consejo: presta siempre atención a la previsión meteorológica. Por ejemplo, riegue siempre sus plantas de hoja perenne antes de un largo período de heladas. Si está seco y no hace mucho frío, debes regar tu planta incluso en invierno.

3. En invierno sales a caminar por el césped.

Si hay escarcha, nieve o hielo, no se debe pisar el césped en invierno. Caminar sobre la nieve podría compactarla, lo que “privaría de aire a la hierba”. Este error puede provocar la fiebre tifoidea, una enfermedad común del césped en invierno.

Sin embargo, si la hierba está cubierta de escarcha o completamente congelada, las briznas individuales pueden romperse al pisarlas. Esto hace que el césped muera y aparezcan manchas marrones en el césped.

4. A tus plantas en maceta les falta luz

Algunas plantas en macetas no toleran las heladas y, por tanto, pasan el invierno en el interior. La adelfa, el laurel, las palmeras datileras y algunos tipos de cítricos siguen produciendo sus hojas incluso en invierno. Por lo tanto, asegúrese de elegir un lugar para estas plantas que no sea demasiado oscuro.

5. Tus plantas sudan bajo protección contra las heladas

Para proteger las plantas de las heladas, las envolvemos bien antes del invierno. Sin embargo, hacia finales del invierno esto se convierte en un problema. Hace mucho calor en los días soleados, pero aún puede congelarse por la noche. Si es necesario, puedes quitar el anticongelante durante el día y volver a colocarlo por la noche. Si las plantas sudan bajo la protección contra las heladas, existe el riesgo de que broten demasiado pronto. Asegúrese también de que el material anticongelante permita el paso de la luz y el aire.

6. Tu pila de abono no está protegida

Esto no es necesariamente un error, pero el siguiente consejo, que puede ayudarle con la jardinería de invierno, tiene sentido: cubra la pila de abono con cartón, alfombras viejas o bolsas llenas de paja u hojas. El calor resultante ya no puede escapar tan rápido y el compost se descompone más rápidamente.

7. No quitas las masas de nieve.

Cuando nieva mucho, es importante prestar atención a los setos y árboles. Si la carga de nieve es demasiado grande, las ramas podrían romperse. Si las ramas ya se están doblando un poco o la capa de nieve tiene más de diez centímetros de espesor, debes liberar tus plantas de la carga de nieve.

8. Le echaste demasiada sal

Salvo algunas excepciones, la sal para carreteras está prohibida para uso privado. Si te sobra algo, no lo esparzas por los caminos del jardín. De hecho, la sal es perjudicial para parterres, árboles y setos cuando se filtra en el suelo con el agua de deshielo.

9. Dejaste que el estanque del jardín se congelara por completo

El estanque del jardín debe permanecer al menos parcialmente libre de heladas para que puedan escapar los gases de descomposición. Estos se forman en el fondo del estanque a medida que los restos de plantas se descomponen. Los peces del estanque corren el riesgo de ser envenenados por estos gases. Por eso conviene retirar las plantas y hojas muertas del estanque en otoño. Para evitar que el estanque se congele, puedes colocar un gran trozo de madera o un plato de poliestireno en la superficie del agua. En caso de emergencia, se debe perforar un orificio de ventilación en el hielo.

10. Almacenas los pesticidas demasiado fríos

Los pesticidas pueden quedar inutilizables debido a las heladas. Por lo tanto, no los guarde en el cobertizo del jardín ni en el garaje durante el invierno. Si la consistencia del producto ha cambiado durante el invierno, es señal de que debes dejar de usarlo.

Si sigue estos consejos de jardinería de invierno, no sólo se ahorrará mucho trabajo, sino también mucho dinero en la sustitución de plantas muertas.