En verano, las malas hierbas brotan de todas las juntas del adoquín, por estrechas que sean. Los remedios naturales ayudan a mantener alejadas las plantas no deseadas.

Las malas hierbas realmente parecen indestructibles. A menudo, desde la hoja brotada hasta la planta adulta, solo se necesitan unos pocos días, y luego es difícil deshacerse de ella nuevamente. Las malas hierbas que crecen entre los adoquines o las losas de las aceras son especialmente difíciles de eliminar. Afortunadamente, existen remedios eficaces que ayudan a controlar las malas hierbas de forma natural.

1. El agua de las patatas, el arroz o la pasta hace que las malas hierbas entren en las articulaciones

El agua de patata, arroz y pasta son excelentes remedios caseros para eliminar las malas hierbas de las articulaciones. Los residuos de almidón contenidos en estas aguas de cocción actúan como herbicida natural sobre las malas hierbas porque obstruyen los llamados estomas (poros de la epidermis inferior de las plantas). Después de hervir, simplemente vierta agua caliente sobre las articulaciones afectadas y las malas hierbas serán repelidas después de algunos usos.

2. Estiércol de ortiga

El estiércol de ortiga es un método eficaz y ecológico para eliminar las malas hierbas. Recoge 1 kg de ortigas y agrégalas a un balde con 10 litros de agua. Deja que la mezcla fermente durante unas dos semanas hasta que aparezca un olor fuerte. Diluir el estiércol con agua (1/10) y verterlo sobre las juntas de malas hierbas. El ácido que contiene daña tanto las plantas que mueren. El estiércol de ortiga también ha demostrado su eficacia como remedio casero contra los pulgones.

Las malas hierbas crecen en las juntas del pavimento. Los remedios caseros ayudan a eliminar las malas hierbas sin dañar el medio ambiente.

3. Bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es otro remedio casero comprobado para las malezas. Simplemente disuelva entre dos y tres paquetes de bicarbonato de sodio en cinco litros de agua y viértalo sobre las articulaciones afectadas. El bicarbonato de sodio mata las malas hierbas y evita que vuelvan a crecer. Sin embargo, esto requiere un uso más frecuente.

  • ¿Por qué se deben evitar el vinagre y la sal?

Aunque el vinagre y la sal a menudo se recomiendan como remedios caseros para controlar las malas hierbas, se deben evitar. El vinagre puede acidificar el suelo y dañar las plantas circundantes. La sal, por otro lado, puede dañar permanentemente el suelo e impedir el crecimiento de las plantas. Estas dos sustancias también se encuentran en el medio ambiente y causan problemas ecológicos. Si se utiliza en caminos pavimentados, como por ejemplo entradas de vehículos, se pueden imponer incluso fuertes multas. Por ello es recomendable utilizar alternativas más sostenibles como los remedios caseros mencionados anteriormente para eliminar eficazmente las malas hierbas de las articulaciones.